Texto de Juan Carlos Carrillo, redactor creativo en Cuadrante
¿Te ha pasado que otra persona entendió de otra manera tu mensaje? Para evitar eso, existe la comunicación efectiva, la cual se define cuando un mensaje se comparte, recibe y comprende sin alterar su objetivo, es decir, el emisor y el receptor interpretan el mismo mensaje, evitando así dudas o confusiones.
Sin importar si la comunicación es verbal, corporal, escrita o audiovisual, es importante asegurarse de que el mensaje llegue correctamente a la audiencia, ya sea en términos de una organización o a nivel personal
El reto de comunicar efectivamente
A nivel interno de una organización, la comunicación efectiva construye y fortalece buenas relaciones de trabajo y productivas, ayuda a cohesionar equipos, rompe barreras para transmitir ideas innovadoras que impulsen el desarrollo de la empresa; y hacia afuera, ayuda a conectar con el público objetivo al mandar el mensaje correcto que se pretende.

El gran desafío, ya sea para una organización o para una marca, es poder planificar, ordenar las ideas y la información que queremos transmitir a la audiencia objetivo sin dejar de lado qué canal conviene más para difundir el mensaje.
Aunque a simple vista parece simple de definir, en realidad no lo es tanto. Desarrollar una estrategia de comunicación efectiva implica tiempo y esfuerzo para cumplir los objetivos alineados a los valores e intereses de la organización o marca, y para eso hay que tomar en cuenta cuatro GRANDES conceptos.
Comunicación efectiva = Las cuatro C’s
A continuación te presentamos cuatro aspectos que debes tener en cuenta la próxima vez que desarrolles una estrategia de comunicación ya sea tanto para tu marca u organización como para tu vida profesional:
Claridad: tus ideas deben entenderse sin palabras difíciles de entender. Ajusta el mensaje según el tipo de receptor que se tiene en frente y adapta el tono de voz, el tipo de vocabulario, etc., para evitar malinterpretaciones y ambigüedades. Por decirlo de otra forma, hay que entendernos para ser entendidos.

Concisión: Nada como ir directo al grano, evita rodeos, nada de ambigüedades ni muletillas. Trata de que tu mensaje sea lo más preciso posible, con los datos datos importantes para que tu audiencia tenga las menores dudas al respecto. Ojo, tampoco reduzcas el mensaje al punto de que pierda fuerza o sea incomprensible.

Coherencia: lo que comuniques debe ser congruente con lo que haces. Lo que quieras transmitir debe tener una lógica, un sentido dentro del contexto en el que se está. Esfuérzate por alcanzar un sentido de unidad en tus ideas y argumentos de manera que tu audiencia sea capaz de seguir cómodamente tu información. Puedes apoyarte de apoyos visuales como gráficas o imágenes que refuercen la coherencia de tus ideas.

Corrección: además de revisar la gramática, sintaxis u ortografía de tu mensaje, asegúrate que lo que expresas sea verdad y provenga de fuentes confiables. Entregar información fidedigna, ayudará a generar confianza entre emisor y receptor, fomentando una comunicación más fluida y abierta.

¡Ya lo sabes! Con estos tips podrás lograr una estrategia de comunicación efectiva e impactar exitosamente a tu audiencia. Si quieres más tips de comunicación, #Acércate a Cuadrante, contamos con los mejores expertos en relaciones públicas y generación de contenidos estratégicos para llegar a tu audiencia e impactar de la forma que buscas.